Los buñuelos fueron inventados por los habitantes moriscos del sur de España. Como resultaban muy baratos ya que llevaban sólo harina, agua y aceite, se hicieron muy populares entre las clases más pobres. Con el tiempo, se mejoraron añadiendo huevo y leche a la masa. Hoy, con sus múltiples variantes, constituyen uno de los platos más socorridos de la cocina tradicional.
Características
Hay dos tipos de buñuelos: los gorditos, con forma de bola, y los planos. Para preparar los primeros hay que echar un sobre de levadura en polvo a la masa para que se infle durante la cocción y freírlos en abundante aceite para que cobren forma.
Ingredientes
2 huevos (se puede usar sólo 1)
1 vaso de leche
3 vasos de harina
sal y aceite para freír
1 vaso de leche
3 vasos de harina
sal y aceite para freír
Preparación
1. Batir los huevos e incorporar la harina y la leche haciendo una masa pegajosa. Si quedara demasiado seca, añadir leche y si estuviera muy líquida, agregar harina.
2. Una vez que la pasta esté lista, echarla a cucharadas en una sartén con aceite caliente procurando que no se peguen entre sí. Cuando la parte superior del buñuelo empiece a secarse, darlos vuelta para que se cocinen por el otro lado.
3. Sacarlos de la sartén y escurrirlos en papel absorbente.
A esta pasta se le pueden añadir todo tipo de ingredientes: pescado, verduras, arroz, maíz, etc.
Si los buñuelos se quieren dulces (por ejemplo, de frutas) poner sólo una pizca de sal y dos o tres cucharadas de azúcar en la masa. Estos se pueden comer espolvoreados con azúcar o recubiertos de miel.
2. Una vez que la pasta esté lista, echarla a cucharadas en una sartén con aceite caliente procurando que no se peguen entre sí. Cuando la parte superior del buñuelo empiece a secarse, darlos vuelta para que se cocinen por el otro lado.
3. Sacarlos de la sartén y escurrirlos en papel absorbente.
A esta pasta se le pueden añadir todo tipo de ingredientes: pescado, verduras, arroz, maíz, etc.
Si los buñuelos se quieren dulces (por ejemplo, de frutas) poner sólo una pizca de sal y dos o tres cucharadas de azúcar en la masa. Estos se pueden comer espolvoreados con azúcar o recubiertos de miel.
2 comentarios:
"Si quedara demasiado seca, añadir harina y si estuviera muy líquida, agregar leche."
¡Cuiudado! Esto está al revés... :-)
Se me fue la pinza, muchas gracias. Ya está corregido.
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